La vivienda es un componente esencial del espacio urbano, del ordenamiento territorial, de la vida comunitaria y del bienestar de las familias de la ciudad.
Nuestro gobierno parte del reconocimiento del derecho a la vivienda digna y adecuada que respeta los usos del suelo y prioriza a la población de menores ingresos. Las acciones de gobierno para garantizar el cumplimiento progresivo del derecho a la vivienda opera en tres vertientes: 1) la reconstrucción y rehabilitación de viviendas dañadas por el sismo de 2017; 2) la ejecución del programa de vivienda social; y, 3) el apoyo a las unidades habitacionales.
Hemos cumplido nuestro compromiso: desde el primer día de gobierno implementamos un Modelo de Reconstrucción de viviendas con base en un esquema de subsidios y otros instrumentos para que todas las familias regresen a habitar una vivienda digna y segura en el menor tiempo posible.
Generamos un Censo Social para actualizar el número de viviendas afectadas: pasamos de poco más de 7 mil contempladas por el gobierno anterior a 17 mil 700 que requieren trabajos de reconstrucción.
Desde el 5 de diciembre de 2018 se han atendido en la Ventanilla Única 36 mil 166 personas damnificadas: 15 mil 420 en juntas matutinas, 872 en oficina central, 928 en módulos de atención de cada zona, 11 mil 873 derivadas de visitas de monitores y 7 mil 873 en asambleas informativas.
A la fecha, se han intervenido 3 mil viviendas unifamiliares y, una vez que hemos sentado bases firmes para el proceso de reconstrucción, asumimos el compromiso de acelerar las obras para llegar a diciembre de este año con más de 7 mil en obra. La meta es terminar la reconstrucción de viviendas unifamiliares a mediados de 2020.
Con un manejo transparente de los recursos asignados a la reconstrucción hemos logrado ahorros importantes por un monto de 222 millones 700 mil pesos contra los presupuestos entregados por las empresas.
Atendemos la emergencia e innovamos en la ejecución del programa de vivienda social con la incorporación del programa de corredores para vivienda incluyente en zonas prioritarias de la ciudad.
Con los programas de mejoramiento de vivienda y de vivienda en conjunto, se han financiado 7 mil 639 y 7 mil 420 , respectivamente. A esto hay que sumar las acciones en los corredores para vivienda incluyente en zonas prioritarias como el Rescate Urbano de la Ciudad Perdida de Tacubaya, con una meta de construcción de 200 viviendas; y el Programa Especial de Vivienda en Atlampa, con la edificación de 70 viviendas.
Avanzamos en la ejecución del Programa Social Rescate Innovador y Participativo en Unidades Habitacionales. Nos proponemos apoyar hasta 2 mil 208 o su equivalente a 80 mil viviendas. Operamos con un modelo de corresponsabilidad entre gobierno y ciudadanos. A través de la organización condominal, se hace la entrega de apoyos económicos de hasta 3 mil pesos por vivienda y local comercial. Al cierre de este informe se trabaja en 800 Unidades Habitacionales, en beneficio de 73 mil 548 viviendas. Esto representa un avance del 92% con respecto a la meta anual.
La falta de vivienda digna y accesible para las familias que se forman cada año es un problema que no se ha resuelto. El aumento constante del precio de la tierra urbana ha encarecido la vivienda y expulsado a millones de sus antiguos habitantes y sus familias a la periferia de la ciudad. Este es un problema que nos hemos propuesto atender a partir de un nuevo modelo que impulse la construcción de vivienda digna y accesible.
En el mes de agosto pusimos en marcha un programa especial de regeneración urbana y vivienda incluyente que iniciará en 10 corredores urbanos y zonas prioritarias que hoy muestran un gran deterioro y donde se concentran las viviendas en situación de alto riesgo. Por estar localizados en las alcaldías Azcapotzalco, Cuauhtémoc, Miguel Hidalgo y Venustiano Carranza, ya cuentan, en su entorno inmediato, con buen equipamiento urbano, factibilidad hidráulica y servicios de transporte público masivo.
Se han iniciado mesas de trabajo con Organizaciones y Cámaras relacionadas con el desarrollo de la vivienda, para definir los esquemas de intervención que permitan incrementar la construcción bien localizada, mediante el modelo de “vivienda incluyente” que garantice la no expulsión de la población residente y la construcción de al menos 30% de vivienda social.
Los proyectos que cumplan con los criterios de elegibilidad serán apoyados con facilidades administrativas y fiscales, acordes a la cantidad de viviendas sociales que aporten.
El 14 de abril se dio a conocer una estrategia de atención integral llamada 333 colonias, pueblos y barrios, que tiene por objetivo disminuir la violencia, mejorar la calidad de vida y garantizar los derechos de las y los habitantes en colonias donde se observan altos índices de vulnerabilidad, altos índice de violencia y comisión de delitos, y bajos índices de desarrollo social.
La estrategia consiste en realizar acciones y programas coordinados entre las distintas dependencias de gobierno para atender, de manera integral, la problemática específica de cada colonia. A partir de un núcleo central de coordinación, que puede ser un PILARES, se reconstruye el sentido de comunidad en cada colonia, pueblo o barrio. La estrategia incluye la realización de asambleas vecinales donde se identifican las necesidades de cada colonia y se definen los programas o acciones necesarias para dar atención continua a las mismas.
Los trabajos en las 333 colonias, pueblos y barrios iniciaron el 23 de abril del 2019 y se desarrollarán de manera continua hasta atender la problemática que dio origen a esta estrategia.