Un componente fundamental para la operación de la estrategia de fortalecimiento de la seguridad es el cambio al marco legal. Un gran paso fue la aprobación de la Ley del Sistema de Seguridad Ciudadana de Ciudad de México, aprobada por el Congreso de la ciudad y publicada en la Gaceta Oficial de la Ciudad de México en agosto de 2019.
En esta ley se redefinieron las atribuciones, responsabilidades y mecanismos de coordinación en materia de seguridad ciudadana. Ratifica la seguridad ciudadana como responsabilidad exclusiva del Gobierno citadino, en colaboración con las alcaldías y sus habitantes; asimismo, articula el funcionamiento de las instituciones de seguridad con base en los componentes de inteligencia, prevención, proximidad, investigación, reacción, custodia, atención a las víctimas del delito y la coordinación con el Gobierno Federal.
El 23 de diciembre de 2019, en la Gaceta Oficial de la Ciudad de México, se publicó el Decreto por el que se expide la Ley Orgánica de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México, y se establecen las atribuciones específicas, organización, estructura y funciones de la policía de proximidad y de los órganos colegiados de la SSC. Asimismo, incorpora la atribución de la SSC de participar, en auxilio del Ministerio Público, en la investigación y persecución de los delitos, en la detención de personas, así como en el aseguramiento de bienes que sean objeto, instrumento o producto del delito, en aquellos casos en que sea formalmente requerida.
El 25 de febrero de 2020, se emitió el nuevo Reglamento Interior de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México, que puntualiza las atribuciones en materia de inteligencia táctica, estratégica y operativa, y análisis e investigación de gabinete y en campo; y otorga facultades a la ssc, bajo la conducción y mando del Ministerio Público, para la prevención e investigación de los delitos de mayor incidencia, así como el secuestro y extorsión. Además, se incorpora la obligación de atender con perspectiva de género las quejas de mujeres policías que denuncien acoso, hostigamiento sexual y laboral, garantizando el respeto a sus derechos humanos y la debida integración del procedimiento de sanción correspondiente.
Con la nueva Ley Orgánica y el nuevo Reglamento Interior de la SSC, se sientan las bases de una sólida organización de la Policía de proximidad y cercanía con la ciudadanía.