El mundo vive una crisis de agua cada vez más grave: una proporción importante de la población carece de acceso digno y seguro a dicho recurso. En Ciudad de México, más de 40% del agua que se consume proviene de fuentes lejanas y una parte importante de los hogares no cuenta con acceso continuo y seguro al vital líquido.
Asumimos el compromiso de garantizar el acceso al agua potable para todos; nos enfrentamos, sin embargo, al doble reto de garantizar el acceso continuo a agua de calidad a una población en crecimiento, al tiempo de avanzar hacia un uso sostenible de los acuíferos que hoy se encuentran sobreexplotados.
En los últimos años, la situación de aprovechamiento del agua ha adquirido una mayor complejidad, debido a la antigüedad de más de 60 años, en promedio, de las redes primarias y secundarias, que han rebasado su vida útil y presentan grandes fugas.
El aumento de la demanda de agua y la sobreexplotación del acuífero han generado impactos ambientales en el suelo (como la deshidratación, reducción de volumen y compactación de las arcillas), lo que ha provocado hundimientos, grietas y socavones en distintas áreas de la ciudad, así como la ruptura de la red hidráulica.
El Gobierno ha comprometido recursos sin precedentes, para rehabilitar la red de agua potable y drenaje con la introducción de tecnologías innovadoras, a fin de garantizar el derecho al agua en cantidad y calidad, disminuyendo progresivamente la sobreexplotación del acuífero.
Uno de los objetivos del programa de gobierno es medir, modernizar e innovar el sistema de distribución de agua potable y promover su medición y control a distancia. Se busca lograr una verdadera automatización de la red que garantice su operación y mejore su eficiencia, así como la disminución de fugas en la distribución secundaria.
Entre agosto de 2019 y julio de 2020, con un presupuesto de $408.62 millones, se concluyó la sustitución de 93.36 km de líneas de agua potable en las diferentes alcaldías y se siguen desarrollando trabajos para la sustitución de 16.98 km de líneas de agua potable con un presupuesto de $228.89 millones.
Por otro lado, se presentan inundaciones, encharcamientos y socavones en la red primaria y secundaria de drenaje en varias colonias de la ciudad. Para solucionarlos, se realizaron acciones de construcción y rehabilitación de colectores y atarjeas que mejoren la capacidad de desalojo y conducción del sistema de drenaje. Del 1 de agosto de 2019 al 31 de julio de 2020, se concluyeron los trabajos de sustitución de 6,001 km en nueve atarjeas ubicadas en las alcaldías Benito Juárez, Cuauhtémoc, Gustavo A. Madero, Venustiano Carranza y Xochimilco; la rehabilitación de 15.270 km de longitud de la red de drenaje, por presencia de grietas, en la alcaldía Iztapalapa, y la sustitución de 3.319 km en ocho colectores de las alcaldías Azcapotzalco, Benito Juárez, Gustavo A. Madero, Iztapalapa y Xochimilco, con un presupuesto global de $154.2 millones en beneficio de 150,000 personas.
Ciudad de México está equipada con un sistema de abastecimiento de agua potable excepcional y único en el mundo; posee la red de agua más grande y compleja del país. Esta complejidad es debido a la topografía de la ciudad, la localización de las fuentes de abastecimiento y las condiciones de algunos componentes de la red de distribución.
Parte de esta complejidad genera grandes diferencias en la presión: en algunas zonas, la red opera con presiones internas por arriba de 6kg/cm2 y con un suministro continuo; mientras que en otras opera con presiones de 0.3kg/cm2 y con un servicio discontinuo. En los lugares en que se cuenta con suministro continuo y presiones elevadas se producen pérdidas importantes debido a fugas, por lo que el volumen de agua no alcanza para abastecer a las zonas en condiciones contrarias.
La sectorización de la red de distribución de agua es uno de los primeros pasos para facilitar el control gradual de la red. Con un mayor control de los volúmenes de agua que entran y salen del sistema, será posible regular la presión interna en las tuberías para disminuir las fugas.
Con este programa, que incluye válvulas de seccionamiento y medidores de presión en sitios estratégicos, así como la construcción y adecuación de sitios de control, se estima que para el 2024, sea posible suministrar agua diariamente a toda la población de manera continua (24*7).
La regulación de la presión a 1kg/cm2 reducirá las pérdidas de agua en más de 2m3/s, lo que permitirá prescindir de la extracción de agua proveniente de 50 pozos.
Al 31 de julio de 2020, están en operación 97 sectores hidráulicos (primera etapa) en la red de distribución de las alcaldías Álvaro Obregón, Azcapotzalco, Benito Juárez, Gustavo A. Madero, Iztapalapa, Miguel Hidalgo y Tlalpan. Se iniciará, también, la construcción de 171 sectores en las alcaldías Álvaro Obregón, Benito Juárez, Coyoacán, Gustavo A. Madero, Iztacalco, Iztapalapa, Tlalpan y Venustiano Carranza, como parte de la segunda etapa.
Para el establecimiento de los sectores se realizó la construcción, adecuación y acondicionamiento de los sitios de medición y control en la red de distribución, y se instalaron válvulas de seccionamiento, tapas ciegas y medidores de presión en sitios estratégicos.Gracias a estos trabajos, que tuvieron una inversión de $338 millones en 2019 y cuentan con $403 millones para 2020, se controlaron las presiones en las tomas domiciliarias, que actualmente se encuentran en un rango de 1 a 5 kg/cm2.
Iniciamos un programa de detección y reparación de fugas en tuberías de agua potable para atender de forma oportuna las fugas visibles y no visibles.
En 2019, se incrementó el número de brigadas para la detección y reparación de fugas de 75 a 150, lo que permitió reducir en 2.0% el caudal perdido y con una recuperación de 10% del suministro.
Con un monto total de inversión de $300 millones, durante todo 2019 fueron atendidas 12,014 fugas. En el periodo de agosto de 2019 a julio de 2020, se reportaron 11,267 fugas de agua potable, de las cuales, 10,739 fueron reparadas y 528 quedan en proceso de atención. Según las estimaciones realizadas, se contempla la reparación anual de 4,000 fugas para el último cuatrimestre del año, alcanzando la atención de 13,000 fugas.
Para el año 2020, se cuenta con una inversión de $43 millones que incluyen la compra de equipo, materiales y herramientas para una mejor atención.
El crecimiento poblacional que aumenta la demanda de agua potable, aunado al desgaste de los pozos en funcionamiento, hace necesario buscar otras fuentes de abastecimiento de agua, como la reposición de pozos profundos y la rehabilitación de pozos de agua potable y de absorción.
El programa de rehabilitación de pozos de absorción contempla la construcción, adaptación y recuperación de estos pozos y resumideros, ubicados en puntos estratégicos de la ciudad. Con estas acciones es posible mejorar el aprovechamiento del agua a través de su captación e infiltración durante la época de lluvias, alimentando a los mantos acuíferos de la zona, mediante escurrimientos naturales a los parques.
Al cierre de este informe, se concluyó la rehabilitación de 75 pozos de absorción y la construcción de cuatro pozos profundos, con un presupuesto de $25.6 millones en beneficio de 122,258 habitantes.
Adicionalmente, se realizó la reposición de nueve pozos profundos en las diferentes alcaldías de Ciudad de México y municipios del Estado de México, con un presupuesto de $51.52 millones, que abonarán al suministro de agua potable con un caudal aproximado de 420 litros por segundo:
Se inició la reposición de otros seis pozos profundos con un presupuesto $97.11 millones que aportarán un caudal aproximado de 320 litros por segundo y en conjunto con los pozos previamente rehabilitados generarán un beneficio para 315,000 habitantes:
Los pozos de agua potable suelen presentar problemas, como el deterioro de la parte subterránea y las afectaciones derivadas de vandalismo. Por ello se trabaja en su rehabilitación a fin de prolongar su vida útil y minimizar los paros operativos.
Con una inversión de $71,834,120.00, del 1 de agosto de 2019 al 31 de julio. Se rehabilitaron 36 pozos de agua potable con actividades de desazolve, cepillado, pistoneo y aforo: 17 de ellos, están en el Sistema Lerma (Estado de México) y 19 en Ciudad de México.
En 2019, se planteó la necesidad de incorporar al sistema de suministro de agua potable varias plantas potabilizadoras que se encontraban fuera de operación o tenían problemas de calidad del agua por la presencia excesiva de hierro (Fe), manganeso (Mn), nitrógeno amoniacal (N-NH4+), sólidos disueltos totales (sdt) y dureza.
Para ello se han realizado adecuaciones con la tecnología propuesta por el Instituto Mexicano de Tecnología del Agua (IMTA).
Al 31 de julio de 2020, se concluyó la rehabilitación y sustitución de 14 plantas potabilizadoras con un presupuesto de $171.9 millones:
Una planta potabilizadora más se encuentra en rehabilitación con un avance de 32% (“Peñón de los Baños”, en la alcaldía Venustiano Carranza) en otras nueve se están iniciando trabajos de rehabilitación y una más está en proceso de licitación.
La micro medición, a nivel usuario, es de vital importancia para poder contabilizar el flujo de agua potable que entra a las tomas domiciliarias y sus ramificaciones, a fin de mejorar la recaudación por la prestación de este servicio.
El Gobierno de la ciudad tiene registradas 2,188,544 cuentas de agua, de las cuales, 754,842 no tienen medidor instalado. Sin embargo, del total de 1,436,863 cuentas de agua con medidor instalado, 851,677 han rebasado su vida útil de servicio y, aproximadamente, 43% tienen problemas de funcionamiento. Esta situación provoca que la contabilización del flujo de agua sea deficiente con la consecuente pérdida en la recaudación y dificultades para detectar fugas en los hogares.
Entre el 1 de agosto de 2019 y el 31 de julio de 2020, se efectuaron 46,000 actividades para incrementar la cobertura efectiva de la micro medición. Se instalaron 8,558 medidores en cuentas de agua sin servicio medido; 19,915 sustituciones de medidor que rebasaron su vida útil y 18,079 rehabilitaciones de medidores con problemas en su funcionamiento.
De manera complementaria, se avanza en la detección y regularización de tomas clandestinas de uso doméstico, no doméstico y mixto.
La toma de decisiones en materia de abastecimiento de agua potable que permitan optimizar el diseño, construcción, operación y mantenimiento de la infraestructura hidráulica de la ciudad requiere de información hidrométrica veraz y oportuna. La medición de flujos y presiones en todas las líneas de conducción de agua potable de la red hidráulica es indispensable.
Con un presupuesto de $200 millones, en 2019 se contó con 613 estaciones hidrométricas de abastecimiento de agua potable y se realizaron obras para la implementación y rehabilitación de estaciones hidrométricas en estructuras de conducciones, pozos de agua potable, tanques, rebombeos y presiones en la red hidráulica. La macro medición se dividió en cuatro etapas para atender las líneas de conducción poniente; el sistema Tlalpan; los sistemas Cutzamala y Lerma Sur, y los Sistemas Lerma Norte y Cartero.
En 2020, con un presupuesto de $118.8 millones, se realizan obras en los sistemas Lerma-Cutzamala, Pozos Ciudad de México, Pozos Lerma y Sistema de Transferencias en conducciones Ciudad de México, y se encuentran en proceso 209 estaciones hidrométricas de abastecimiento de agua potable que serán concluidas este año.
Al 31 de julio de 2020, se concluyó la elaboración del Programa de Gestión Integral de los Recursos Hídricos 2019-2024, un instrumento de planeación que guíe la política pública en relación con el desarrollo, control y prestación de los servicios hidráulicos para la población de forma constante, equitativa, asequible, accesible, suficiente y evaluable.
El objetivo de este instrumento es garantizar que toda la población tenga agua diariamente, las 24 horas del día, con una presión mayor a 1 kg/cm2. A partir de la implementación de esta estrategia será posible prescindir de la explotación de 50 pozos en zonas de mala calidad, a la vez que permitirá evitar mayores hundimientos (grietas), la disminución de encharcamientos e inundaciones, el saneamiento de los cuerpos de agua y el reordenamiento del agua residual tratada.
En lo que resto del año, se avanzará en la elaboración del Plan Maestro de Agua Potable 2019-2024 y del Plan Maestro de Drenaje, Tratamiento y Reúso 2019-2024. Ambos son instrumentos de planeación para guiar las políticas públicas de esta administración; así como de la construcción de escenarios para estimar la oferta y demanda de agua y su disposición final.
En un contexto de alta demanda de infraestructura hidráulica de drenaje y el rebase de las capacidades de la infraestructura, cuando se presentan eventos extraordinarios que provocan inundaciones, se requiere la construcción de cárcamos de bombeo y colectores. La función principal de estas estructuras es el desalojo de las aguas residuales y pluviales.
En 2019, iniciamos la rehabilitación integral del drenaje profundo con el fin de incrementar la capacidad de desalojo del Interceptor Oriente Sur (ios) del túnel de la lumbrera 5. Este interceptor desaloja las aguas residuales y pluviales de toda el área metropolitana en las alcaldías Iztapalapa, Iztacalco y Venustiano Carraza.
Los sistemas de compuertas, cajones de captación y lumbreras que se encuentran en contacto directo con las aguas habían agotado su vida útil; además de que los gases que se emanan provocan desgaste y corrosión de todos los componentes, los cuales tienen que ser reemplazados. Adicionalmente, se están rehabilitando las instalaciones afectadas por el vandalismo.
Durante la rehabilitación del ios se realizaron actividades de retiro y limpieza de 2,500 m3 de azolve en el interior del túnel, utilizando maquinaria retroexcavadora y grúa con un presupuesto de agosto a diciembre de 2019 de $3.1 millones.
En 2020, se realiza la rehabilitación de 30 m del cajón de descarga del río Churubusco a la lumbrera 7 del ios. Se trabaja también en la segunda etapa de rehabilitación de la toma del Gran Canal (0.55 km) y en la rehabilitación de compuertas de las captaciones del sistema de drenaje profundo, lumbreras, lagunas de regulación, plantas de bombeo y cajas.
Al 31 de julio de 2020, se tiene un avance de 70% en las actividades dirigidas a la rehabilitación del drenaje profundo, en beneficio de un total de 1,600,000 habitantes de la entidad, con un presupuesto total de $40.7 millones.
Con la finalidad de recuperar la capacidad original de las plantas de bombeo, así como de los equipos electromecánicos que las conforman, que en su mayoría rebasaron su vida útil, es necesario sustituir y rehabilitar sus componentes electromecánicos.
Al 31 de julio de 2020, se tiene un avance de 75% en la rehabilitación de plantas y cárcamos de bombeo, con la adquisición de 130 equipos mecánicos y electromecánicos, nuevas conexiones de drenaje y la construcción de 296 nuevos albañales. El presupuesto para estos trabajos es de $74.7 millones.
Asimismo, está por finalizarse la construcción de una planta de bombeo en la colonia Girasoles III, que tiene una capacidad de 500 litros por segundo y permitirá trasladar el agua al colector de División del Norte Las Bombas, en beneficio de 15,000 habitantes; con una inversión de $19.7 millones.
En el Protocolo de operación conjunta para la temporada de lluvias en 2019-2020 del Sistema Hidrológico del Valle de México, se trabajó en coordinación con la Comisión Nacional del Agua, el Gobierno del Estado de México y el Gobierno de Ciudad de México.
Para este protocolo de operación se requiere el buen funcionamiento y la apertura de 28 estructuras del Sistema Hidráulico Metropolitano, principalmente de Drenaje Profundo (Túnel Emisor Central y Túnel Emisor Oriente), Gran Canal, Río de los Remedios, Río Hondo, Río de la Compañía, “Dren General del Valle” y Río Churubusco.
Durante la temporada de lluvias en 2019-2020, se diagnosticaron y atendieron 69 sitios: se rehabilitaron rejillas estructurales, 11 de ellas en Álvaro Obregón, 19 en Gustavo A. Madero, ocho en Iztapalapa, una en La Magdalena Contreras, ocho en Miguel Hidalgo y 22 en Tlalpan.
Asimismo, se atendieron 14 sitios con sustitución de marimbas (precolados) en estructuras de la red de drenaje, tres de ellos ubicados en Álvaro Obregón, seis en Benito Juárez, dos en Miguel Hidalgo, uno en Coyoacán, otro en Tláhuac y uno más en Xochimilco; con un presupuesto de $26.2 millones, en beneficio de 200,000 habitantes.