Durante estos cinco años la política presupuestal del Gobierno de la Ciudad ha promovido el ejercicio regular del gasto programado, la realización de inversiones de largo plazo y el fortalecimiento de la transparencia y la disciplina en materia de gasto. Dimos viabilidad al mayor programa de inversión pública en la historia reciente de la capital, atendimos la emergencia sanitaria y garantizamos la operación de los distintos entes públicos, sin corrupción y con honestidad.
Al inicio de la administración encontramos criterios heterogéneos en la revisión y registro de movimientos presupuestarios, situación que dificultaba el seguimiento del gasto público. Para combatir la corrupción estandarizamos los formatos internos de control y los criterios para la revisión, con ello, además, disminuimos el tiempo promedio de registro de los documentos de diez a tres días.
En 2020 se reestructuró todo el presupuesto para vincular cada peso al logro de resultados, fortalecimos la planeación, realizamos una mejor asignación de recursos y dimos seguimiento puntual al avance de los programas. El modelo de
Gestión para Resultados, a través de sus componentes principales, el Presupuesto basado en Resultados (PBR) y el Sistema de Evaluación del Desempeño (SED) han permitido tener un mejor control del gasto, y orientar las erogaciones hacia acciones, bienes y servicios con impacto en la generación de beneficios sociales. La Ciudad de México ha pasado del lugar 17 en 2018 a la posición 9 en 2023 en la implementación del PBR-SED en las entidades federativas, de acuerdo con la SHCP. Toda la información presupuestaria se publica en Datos Abiertos.
Estamos haciendo la mayor inversión pública en la historia de la ciudad, con una mirada de largo aliento que da viabilidad a la ciudad por lo menos durante los siguientes 20 años. Entre 2019 y 2023 se han destinado más de $123,122.4 millones para la inversión en infraestructura, medio ambiente y servicios públicos, que sumados a la inversión financiada para la modernización de la Línea 1 del Metro, eleva el monto a más de $160,000 millones, lo que representa un incremento de 65.7% comparado con la inversión realizada en el mismo periodo por la administración anterior.
Entre 2019 y 2022 el Gobierno de la Ciudad ha destinado $24,881.8 millones para cubrir demandas sociales y garantizar derechos, con programas como Beca Bienestar para niñas y niños, Útiles y uniformes escolares, La Escuela es Nuestra-Mejor Escuela, Va Segur@, entre otros, que atienden a más de 1.2 millones de beneficiarios.
En 2019 diagnosticamos un rezago importante en el sector salud en materia de inversión, provisión de insumos y equipamiento de hospitales y clínicas. Decidimos invertir en la construcción y remodelación de hospitales y clínicas, la creación de la Universidad de la Salud y en investigación y desarrollo.
Ante la pandemia en 2020 redistribuimos el presupuesto para atender la salud de las personas y la economía de familias y empresas. Durante 2020 se destinaron $8,002.3 millones extraordinarios para la reconversión de hospitales para la atención exclusiva de pacientes COVID, ampliación de hospitales híbridos e instalación de módulos de primer contacto (Triaje). El presupuesto para transferencias directas creció 42.5%, de $36,996.5 millones originalmente aprobado a $52,708 millones, para dar continuidad y expandir los programas sociales, que funcionaron como una red de protección para los hogares de menores ingresos.
En 2021 se destinaron $3,469.6 millones para reforzar la operación del ERUM, implementar Módulos de Triaje extrahospitalarios; establecer Centros de Salud COVID, para atender pacientes ambulatorios; entregar kits de medicamentos a todos los pacientes con diagnóstico positivo e implementar una estrategia efectiva para la aplicación de 14.9 millones de vacunas; entre otras acciones. Se otorgaron apoyos económicos a personas en situación vulnerable por un monto de
$312.6 millones, entre ellas, trabajadoras en restaurantes, personas que elaboran y venden artesanías, personas mayores empacadoras en supermercados y personas migrantes, refugiadas o desplazadas internas. En total, la ciudad destinó en dos años $11,471.9 millones para atender la emergencia sanitaria y sus efectos en la salud sin contar los recursos destinados a apoyar la economía de familias y empresas, más que ninguna otra entidad del país.
Al inicio de la administración se encontró que cerca de 30% del presupuesto anual se gastaba en bienes y servicios con altos precios y calidad no comprobable. Los procesos de compras públicas, realizados en papel y de manera presencial, abrían la puerta a la corrupción, obstaculizando la competencia por el reducido número de participantes. Esto repercutía en altos costos administrativos y dificultades para evaluar.
Hemos transitado a un sistema electrónico de adquisiciones con procesos totalmente digitales, que cierran espacios de corrupción. El nuevo sistema de compras públicas denominado Tianguis Digital da seguimiento a los procedimientos de contratación pública, desde la planeación hasta la ejecución de cada contrato. La renovación del Padrón de Proveedores simplificó el proceso de registro, con lo que el número de proveedores pasó de 1,700 en 2018 a 6,548 proveedores con constancia vigente al cierre del primer trimestre de 2023. Entre el 5 de diciembre de 2018 y el 31 de diciembre de 2022, se realizaron 148 procedimientos de compra consolidada de bienes y servicios con ahorros de 15%, en promedio. El innovador Tianguis Digital ha recibido galardones nacionales e internacionales por su impacto en la transformación en las compras públicas.