Consultar informes

Atención a brotes

Acciones para controlar la transmisión de Covid-19 en la Central de Abasto (CEDA)

La Central de Abastos (Ceda) es el principal punto de abastecimiento de víveres para la ciudad. Más aún, su adecuado funcionamiento tiene una importancia estratégica para toda la ZMVM. El tráfico intenso que implica la compraventa de alimentos para el abasto de la ciudad y su zona conurbada hace a este espacio particularmente vulnerable al contagio masivo, tanto para los locatarios como para los clientes. Registra diariamente la asistencia de 90,000 trabajadores y una afluencia promedio de 500,000 visitantes. Dadas sus características, la Ceda fue identificada como zona de alto contagio, lo que se ratificó en cuanto ascendieron los índices de morbimortalidad. 

La acción social “Acciones para disminuir la morbimortalidad en la Ceda” inició el 28 de abril de 2020 con la finalidad de contribuir en la disminución de los índices de morbimortalidad por Covid-19 en la Ceda. Algunas de las actividades que se han implementado, con el apoyo de servidores públicos de diversos entes de la Administración Pública de la Ciudad de México, son: 

Se han realizado 47,320 cuantificaciones de temperatura; se han distribuido 105,959 dosis individuales de gel antibacterial, y se han otorgado 153,279 orientaciones individuales.

Tamizaje SMS en la Central de Abasto (CEDA)

A partir del 28 de abril, se puso a disposición de la ciudadanía un flujo de preguntas particular para la Ceda en el tamizaje automatizado. Aunque es similar al flujo delineado para la ciudadanía en general, incluye preguntas específicas para las personas que ahí trabajan. Este cuestionario está disponible vía sms, sin costo, enviando la palabra “abasto” al 51515.

Se instalaron controles sanitarios en las entradas de la Ceda, mismos que son gestionados por personal de la Sedesa. Los promotores de la salud utilizan el servicio de mensajería SMS para contestar las preguntas del tamizaje en sus dispositivos móviles.

Esta les permite realizar el tamizaje y dar seguimiento personalizado a las personas que ingresan, identificándolas con una fotografía. Con base en esta información y el seguimiento a casos potenciales, se determina si se permite la entrada a la Ceda o no, con el único objetivo de evitar contagios. Las carpas instaladas en el exterior de la Ceda fueron equipadas con internet para garantizar su funcionamiento.

Fabricación de gel antibacterial en la CEDA

Para enfrentar la escasez de insumos básicos para el apoyo de las labores de prevención, el Gobierno de la Ciudad de México, por conducto de la Central de Abasto, montó una planta temporal de producción de gel antibacterial, al 70% mínimo de etanol, operada por ingenieros egresados del Instituto Politécnico Nacional. 

La planta operó de abril a junio, elaborándose un promedio de 2 mil litros diariamente; ello permitió entregar 45,000 litros de gel antibacterial a diversos entes de la Administración Pública de la Ciudad de México durante los primeros meses de la pandemia.

Fabricación de gel antibacterial en la Central de Abasto

La producción se realizó con etanol, materia prima fundamental, donado por los miembros de la Comisión para la Industria de Vinos y Licores (CIVyL).

Prevención y atención de la Covid-19 en el Sistema Penitenciario

Se aplicaron medidas sanitarias en los 13 centros penitenciarios capitalinos, así como en los seis Especializados en Atención a Adolescentes y el de Sanciones Administrativas y de Integración Social “El Torito” para prevenir posibles contagios.

Desde la Fase 1 de atención a la pandemia, se establecieron protocolos de actuación específicos para atender la emergencia de la mejor manera posible y resguardar la salud de la población penitenciaria, priorizando las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y de las Secretarías de Salud federal y local.

Asimismo, fueron programadas guardias permanentes de atención médica, filtros sanitarios, acceso a videollamadas; se formuló un plan de trabajo penitenciario; un programa de capacitación a distancia; la elaboración de insumos de protección en el sistema penitenciario; y, la puesta en marcha de liberaciones por causas humanitarias y preliberaciones.

Protocolo en centros penitenciarios

Desde el inicio de la pandemia se establecieron medidas para la atención de poblaciones vulnerables, incluida aquella privada de la libertad, por lo que se intervino en los 13 centros penitenciarios de la capital. El objetivo principal fue evitar el incremento en la incidencia de casos de Covid-19 y facilitar la atención a aquellas personas que presentaran la sintomatología de la enfermedad. Se implementó un protocolo de atención específico para el sistema penitenciario, que incorporó las siguientes medidas:

Servicio de ambulancia para traslados a hospitales

Se equiparon seis ambulancias con tanques de oxígeno, mascarilla y burbuja, así como paramédicos y operadores. Estas unidades se asignaron al Centro Femenil de Reinserción Social Santa Martha Acatitla, Reclusorio Preventivo Varonil Norte, Reclusorio Preventivo Varonil Oriente y Reclusorio Preventivo Varonil Sur, con el propósito de trasladar a personas privadas de la libertad diagnosticados con Covid-19 a hospitales. Del 2 de mayo al 31 de julio de 2020, se realizaron 81 traslados de emergencia.

Elaboración de insumos de protección en el Sistema Penitenciario 

Con el propósito de aprovechar la experiencia de las personas privadas de la libertad en la confección de prendas textiles y apoyar las acciones de prevención de contagio, adaptamos los talleres de costura y sastrería para la elaboración de cubrebocas, mandiles y caretas de protección. Estas prendas fueron destinadas a las personas servidoras públicas que realizan labores de promoción de las medidas de sana distancia en territorio.

Del 1 de marzo al 31 de julio de 2020, 70 personas privadas de la libertad de los centros penitenciarios elaboraron, en los talleres de costura, 236,350 cubrebocas desechables; 3,000 cubrebocas reutilizables, 1,000 caretas protectoras y 1,000 batas de polipropileno.

Elaboración de cubrebocas en centros penitenciarios

Programa de Capacitación a Distancia en Centros Penitenciarios 

Las nuevas condiciones para la convivencia en espacios comunes, ocasionada por el brote de la enfermedad, impactó el desarrollo de las actividades de capacitación y trabajo penitenciario, por lo que fue necesario implementar nuevas estrategias como el diseño de manuales de capacitación para el aprendizaje independiente.

Del 1 de marzo al 31 de julio de 2020 se diseñaron 10 manuales de capacitación. Estos fueron distribuidos entre 1,500 personas participantes. Esta modalidad de capacitación a distancia permitió mantener su tratamiento de reinserción social a través de la capacitación y el trabajo.

Filtros sanitarios en los Centros Penitenciarios 

Con el objetivo de garantizar que toda persona que ingresó a los Centros Penitenciarios (abogados, actuarios, proveedores, personal, visita familiar) no represente un riesgo a la salud de las personas privadas de la libertad, a partir del 19 de marzo se instalaron filtros para toma de temperatura corporal, aplicación de gel antibacterial y el llenado de un cuestionario médico. 

Además, se instalaron otros filtros al interior del sistema penitenciario, con el propósito de detectar síntomas entre la población, con prioridad en grupos vulnerables (adultos mayores, personas con discapacidad, mujeres embarazadas y niñas y niños que viven con sus madres en reclusión). Se tomó la temperatura corporal dos veces al día a los 878 adultos mayores privados de la libertad, lo mismo que a personas con VIH y enfermedades crónico-degenerativas como diabetes, obesidad, hipertensión arterial sistémica, osteoartrosis, enfermedades cardio cerebrovasculares, enfermedades reumáticas, entre otras.

Se implementaron filtros sanitarios a la entrada de centros penitenciarios

Liberaciones por causas humanitarias y preliberaciones

Con el propósito de dictaminar los casos que corresponden a los supuestos establecidos en el artículo 146 de la Ley Nacional de Ejecución Penal -y como un a medida destinada a evitar la propagación de contagios al interior de los centros penitenciarios-, realizamos el análisis de la situación jurídica de las personas adultas mayores privadas de la libertad portadoras de alguna enfermedad crónico-degenerativa o terminal.

Del 20 de marzo al 31 julio de 2020, se realizaron las gestiones procedentes ante el Poder Judicial de la Ciudad de México para la liberación de 415 personas adultas mayores. Además, se revisaron los expedientes y situación jurídica de la población privada de la libertad, con el propósito de identificar aquellas susceptibles de obtener algún beneficio penitenciario. Durante los meses de abril a julio, y como consecuencia de esta revisión se solicitaron 40 beneficios de libertad ante de Ejecución de Sanciones Penales.

Videollamadas en los Centros Penitenciarios 

A partir del 28 de marzo de 2020 se tomaron medidas para restringir el acceso a personas mayores de 60 años a la visita familiar; en una segunda fase se restringió el acceso a menores de edad y mujeres embarazadas. Además, se redujeron los días de visita de tres a dos y a partir del 4 de abril y sólo se autorizó la visita de dos familiares por interno. Esta medida permitió disminuir la afluencia en 50%. Para compensar esta situación, se establecieron mecanismos compensatorios como el incremento del tiempo de llamadas telefónicas y se inició el proceso de videollamadas familiares, previa autorización de las autoridades penitenciarias. Del 3 de abril al 31 de julio de 2020 se realizaron 705 videollamadas.

Plan de Contingencia de Trabajo Penitenciario 

Con el propósito de establecer medidas temporales para la continuidad de las actividades productivas y de capacitación de las personas privadas de la libertad, el Gobierno de la Ciudad implementó protocolos e higiene y sana distancia para evitar la propagación de la enfermedad al interior de los Centros Penitenciarios de la Ciudad de México.

Esto permitió dar continuidad a las actividades de capacitación en actividades, como: producción de pintura, manufactura textil, serigrafía, lavandería, asesores educativos, promotores culturales y deportivos, panadería, tortillería, purificación de agua y huertos urbanos.

Esta acción se sustentó en la ejecución de las siguientes actividades: