Nos comprometimos a restableceremos la austeridad republicana y para ello hemos sido firmes en la promesa que hicimos de acabar con los privilegios de los altos funcionarios y la corrupción a través de varias acciones.
Con el objetivo de privilegiar el interés público y construir una administración con transparencia y honestidad, eliminamos los seguros de gastos médicos mayores privados, viáticos y gastos de representación de los funcionarios públicos. Lo anterior representó un ahorro para la ciudad de más de 211 millones de pesos; más del 95% debido a la eliminación de gastos médicos.
Se cancelaron las escoltas de todos los funcionarios públicos y, en su lugar, los elementos fueron orientados al cuidado del pueblo, 1,400 policías que acompañaban a exfuncionarios y a otras personas que no pagaban por el servicio, fueron incorporados a las labores de la policía preventiva y los vehículos blindados se trasladaron a la Secretaría de Seguridad Ciudadana. La única excepción al retiro de escoltas fueron aquellas destinadas a los titulares de la Secretaría de Seguridad Ciudadana y de la Procuraduría General de Justicia que, por su trabajo, requieren de protección especial.
Recortamos todas las plazas que no fueran necesarias y que únicamente generaban altos costos para el gobierno y para la sociedad. Las plazas de altos puestos de gobierno fueron disminuidas y desaparecimos aquellas creadas para pagar favores políticos y asesorías por honorarios.
Adicionalmente, se examinaron cuidadosamente los puestos de estructura y por honorarios. En el primer caso, se revisaron todas y cada una de las plazas con el fin de identificar aquellas con funciones duplicadas, sin impacto o sin justificación. Con ello, se suprimieron 1,712 plazas con una reducción de la estructura gubernamental de más del 15% y un ahorro de cerca de 600 millones de pesos. El proceso implicó pasar de 99 a 92 unidades administrativas, reducir 24% las plazas con nivel subsecretaría, 20% las direcciones generales y 10% los puestos directivos. En lo que compete a puestos por honorarios, el presupuesto asignado a su contratación en el gobierno central disminuyó en 31% respecto a 2018, lo cual significó un ahorro para la ciudad de alrededor de 524 millones de pesos en términos reales.
A partir de estos ahorros, se pudo dar viabilidad financiera a la creación de diversas instituciones y se fortalecieron estructuras operativas de organismos que brindan servicios públicos. Entre estos se encuentran los Puntos de Innovación, Libertad, Arte, Educación y Saberes (PILARES) y el C5. Otras actividades al servicio de la comunidad también contaron con recursos adicionales: los proyectos de reconstrucción de las viviendas dañadas por el sismo del 19 de septiembre de 2017; los mecanismos de detección y atención a fugas de agua, la contratación de policías y la provisión de apoyos especiales para médicos especialistas y licenciadas en enfermería.