Al inicio de este gobierno, encontramos un sistema de transporte público en situación de crisis debido a la fragmentación institucional del sistema de movilidad, a un gran abandono de la infraestructura y de los servicios de transporte público, y grandes inequidades en los tiempos de traslado y condiciones de viaje. La población más vulnerable es la de la periferia de la ciudad que invierte largos tiempos de traslado en un sistema deficiente e insuficiente.
Nos comprometimos a hacer efectivo el derecho de las personas a un transporte público seguro, accesible y rápido. Este objetivo implica la creación de un sistema de movilidad integrado que garantice viajes cómodos y seguros para toda la ciudadanía, con énfasis en la seguridad de las mujeres, una reducción de los tiempos de traslado a bajo costo para las familias, y que haga más fluido el tránsito vehicular al tiempo que garantice la seguridad de los peatones, a partir de un mejor diseño de las intersecciones y que tome en cuenta todas las formas de movilidad.
El Plan Estratégico de Movilidad 2019 busca garantizar el derecho de sus habitantes a la ciudad ubicando a las personas en el centro de las políticas de movilidad urbana. La estrategia atiende tres objetivos estratégicos: i) la integración física, operacional, de modo de pago y de imagen de los distintos sistemas de transporte de la ciudad, favoreciendo la intermodalidad y promoviendo los viajes a pie, en bicicleta y en transporte público; ii) mejorar el transporte público para atender el abandono y deterioro de la infraestructura y los servicios existentes; y iii) la protección a la integridad de las personas que utilizan los distintos sistemas de transporte, a través de la provisión de infraestructura y servicios incluyentes, dignos y seguros.Los seis principios transversales de esta estrategia son: sustentabilidad, mediante la promoción del uso de modos y tecnologías bajos en carbono. Innovación, con la introducción de procedimientos orientados a maximizar la eficiencia de la red de transporte. Equidad, mediante el desarrollo de iniciativas orientadas a favorecer a los sectores más vulnerables de la ciudad, particularmente aquellos que habitan en las periferias de escasos recursos. Género, atendiendo tanto a la violencia hacia las mujeres en los distintos sistemas de transporte de la ciudad como en sus necesidades particulares de viaje. Transparencia, en la discusión y desarrollo de políticas, programas, proyectos y en la utilización de recursos. Calidad, en la provisión de infraestructura y servicios.