Hemos asumido, como una prioridad de gobierno, que la seguridad y la paz de la ciudad y sus habitantes requieren de una intervención de carácter integral para atacar las causas estructurales de la inseguridad y la violencia.
Nos adherimos al Plan Nacional de Paz y Seguridad porque la única manera de disminuir la violencia es ofreciendo a la población el acceso efectivo y progresivo de sus derechos humanos: a la educación, a la salud, a la cultura, a una vivienda digna, al empleo decoroso, al deporte, y a vivir en un entorno seguro y en paz.
Como parte de la estrategia para fortalecer la prevención y la no violencia, impulsamos el conjunto de acciones del Eje 1 de nuestro Programa de Gobierno 2019-2024, creamos programas específicos para la atención y mejora de oportunidades de zonas de mayor incidencia delictiva y alto grado de marginación social a través de PILARES y la Estrategia 333 Colonias, Pueblos y Barrios, con atención especial a la infancia y a las personas jóvenes, la mejora del espacio público y la revitalización del tejido social comunitario.